Casos enigmáticos y aterradores de fallas en la Matrix (parte siete)

Hoy, les tenemos una entrega de fallas en la Matrix que, siendo totalmente sinceros, son historias que tienden más al lado del terror y los enigmas aunque guardan esa esencia anecdótica de las otras historias inexplicables presentes en la serie. Tómalo con calma, quizá en un futuro cercano tú seas el protagonista de algo parecido.

Portal subterraneo

 

Jamais vu.

Cuando era más joven experimenté un par de veces el deja vu, y ciertamente es algo extraño pero no se compara con el fenómeno opuesto, jamais vu, que tuve la mala fortuna de conocer un par de ocasiones durante una época de profundo estrés laboral hace algunos años.

En ambas ocasiones me encontraba conduciendo mi automóvil por un vecindario completamente familiar cerca de casa cuando, de repente, perdí completamente la noción del lugar donde me encontraba y hacia donde me dirigía. Se siente como si fueras inmediatamente teletransportado a un país extranjero.

Teletransportacion

Estos sólo duró algunos segundos, pero fue lo suficientemente aterrador como para marcarme de por vida. Hasta que me sucedió, no tenía idea que algo así existía. Cuando acudí al doctor, me comentó que probablemente había sido consecuencia del estrés, aunque existen condiciones más graves que pueden desencadenar estos síntomas.

 

El cobertizo.

Acababa de cumplir los 22 años en la época que mis padres vendieron su casa en la ciudad y adquirieron una propiedad en provincia. En este terreno los dueños anteriores habían construido un cobertizo no muy lejos de la casa principal, por lo que decidí convertirlo en mi habitación, y aunque en ocasiones me sentía algo incómodo en ese lugar, mi perro me hacía compañía por lo que las situaciones eran más llevaderas.

Quizá había estado en este lugar un par de semanas, y una noche que me encontraba en la computadora, con mi perro durmiendo sobre mis pies, me dieron ganas de orinar por lo que me levanté y salí del cobertizo. La noche estaba perfectamente clara y las estrellas en el cielo se veían increíbles. Lo próximo que escuché fue la puerta del cobertizo azotándose atrás de mí.

Inmediatamente me di vuelta e intenté abrirla pero no cedió. Peor aún, al interior escuché a mi perro empezar a gruñir, primero despacio y después muy fuerte, pero cuando empezó a ladrar entré en pánico intentando abrir aquella puerta.

Cobertizo de madera

Debo mencionar que soy un sujeto fornido de 1.8 metros de estatura, practico deportes, etcétera. Pero incluso empujando con todo mi peso no pude abrir, y el terror se apoderó de mí cuando los ladridos de mi perro se convirtieron en quejidos, después gemidos y entonces llegó el silencio. Con todas mis fuerzas golpeé la puerta hasta que finalmente se abrió de golpe.

La bombilla al interior del cobertizo estaba apagada y no fui capaz de volver a encenderla, por lo que entré en completa oscuridad. No vi a mi perro por ningún lado y me moví a tientas intentando llegar hasta una lámpara, finalmente la encontré y cuando la encendí, nada pudo prepararme para lo que estaba a punto de ver… literalmente, mi perro se había apretujado en el rincón más oscuro y lejano de esa construcción, tenía los ojos cerrados y temblaba sin control.

Inmediatamente me dirigí hacia él y tan pronto como me acerqué, se echó a mis brazos y se quedó allí. Lo levanté y les juro que jamás en mi vida había corrido tan rápido. Nunca volví a poner un pie en el cobertizo y mi perro ni siquiera quiere acercarse a esa parte de la propiedad.

No tengo idea de lo que sucedió aquella noche, pero jamás lo olvidaré.

 

Una vuelta temporal.

Hace alrededor de un año, mi novia y yo fuimos a cenar a Chipotle. La sucursal se encuentra en una pequeña área comercial con una hamburguesería y un Pei Wei prácticamente al lado… una de esas clásicas áreas comerciales para la clase alta.

Sucursal chipoitle

Ingresamos al estacionamiento frente a los establecimientos en torno a las 5 de la tarde de un viernes sólo para encontrar el lugar completamente vacío. No observamos mesas en el exterior, tampoco había automóviles en los cajones de estacionamiento, ni una sola persona a la vista e incluso las luces al interior de los edificios estaban apagadas.

Completamente confundido, conduje el auto en una especie de bucle en torno al edificio para irme de allí. La única cosa inusual en el solitario lugar era un camión de bomberos estacionado sobre uno de los laterales del inmueble, tenía las luces encendidas pero no la torreta ni la sirena, y no había nadie en el interior. Aquella situación nos preocupó un poco, pues quizá se había desatado un incendio al interior.

Rodeamos la parte trasera del establecimiento y nos dispusimos a terminar el bucle para irnos, por lo que teníamos que volver a pasar por la fachada…

Y así lo hicimos, pero en esta ocasión cada cajón del estacionamiento estaba ocupado, había mesas en el exterior repletas de clientes y comida servida. Un montón de gente caminaba por este lugar, y el interior del edificio estaba completamente iluminado. Lo único que faltaba era el camión de bomberos. Nos tomó aproximadamente 30 segundos rodear el edificio. Es una de las situaciones más extrañas que me ha tocado vivir.

 

Mi vieja habitación.

Hace aproximadamente un año tuve una pesadilla terrible.

Empezaba cuando me despertaba en una cama durante una tormenta eléctrica. Mientras la habitación se iluminaba una y otra vez por los destellos de los rayos en el exterior, me daba cuenta que la cama donde descansaba no era la mía. La cabecera de esta cama se encontraba contra la misma pared donde se ubicaba la puerta, y desde mi perspectiva no podía decir si estaba abierta o cerrada.

Ojo

Así pasó la pesadilla hasta que observé el rostro. Al principio, únicamente la nariz y la mandíbula sobresalían por el marco de la puerta, pero paulatinamente aquel rostro se fue asomando. Intenté gritar, pero había perdido la voz. Sin importar la fuerza que hiciera, ningún sonido emanaba de mi garganta y la persona seguía entrando a la habitación mirando al frente, lejos de mí.

Entonces, cuando estaba completamente adentro, su cabeza giró y me miró directamente a los ojos. Intenté salir de la cama, pero me quedé completamente paralizada. Esta persona empezó a dirigirse hacia mí, pero con cada paso que daba su cuerpo se contorsionaba de una forma que hubiera roto los huesos a una persona normal. Su cuello era tan elástico que la parte posterior de su cabeza pegaba con la espalda y su quijada con la parte baja del pecho, sus brazos rotaban sobre los hombros y se ubicaban sobre la espalda como si fueran alas. Era algo profundamente aterrador. Y justo antes de que me alcanzara, desperté.

Mama monstruo

Al día siguiente le conté a mamá sobre la pesadilla, haciendo énfasis en los detalles de la habitación. Resulta que el lugar era una copia casi exacta de la habitación que tuve cuando era bebé. Nos mudamos de esa casa cuando era muy joven, por lo que resultaba imposible que pudiera recordarla.

15 comentarios en «Casos enigmáticos y aterradores de fallas en la Matrix (parte siete)»

  1. Les voy a contar una historia que me sucedio, no se si es real o fue mi imaginacion, pero un dia frio de enero como a las tres de la mañana me desperte, resulta que la noche anterior habia comdo mucho y me desperto la molestia del estomago, me dirigi al baño en plena obscuridad, prendi la luz del baño y me dispuse a hacer lo que dictaba la naturaleza de mi molestia, y de repente…. Me doy cuenta que no habia papel higienico, podria jurar que estaba ahi cuando entre, realmente misterioso.

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  2. Yo una vez iba en el carro, estaba poniendo atención a un tope en la calle y de reojo vi que venían 4 personas bajitas, como niños llegando a la esquina, al pasar junto a ellos su silueta se me hizo extraña, pero no voltee a verlos, solo que recuerdo verlos de colores, como 2 azules, verde y rojo, aparte uno muy delgado, otro muy gordo y otros muy bajitos, lo raro no fue eso, si no que cuando quise verlos por el espejo ya no estaban, no pudieron haber pasado la calle, ni haberse regresado, en lo que ves de un espejo retrovisor lateral al que tienes en medio del parabrisas no da para que no notes que corren o algo, la verdad no sé que pasó y no fue sueño ni estaba predispuesto por una película, porque varios de los relatos que pones si parecen mucho de sueños, alzheimer o escenas de películas, pero eso fue a medio día, en un día normal, en un instante loco.

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  3. Hace un par de años que trabajo en hoteleria como auditor, una noche recibí una llamada , atendí como de costumbre, resulta que era un huésped que estaba en el segundo piso, concreta mente frente a la habitación 217, me pidió una copia de su habitación, como no me quiso dar el nombre y me colgo entonces mande al guardia, resulta que llego el guardia al piso y no había nadie, segundos después me marca de nuevo enojado que nadie a subido a dejarle su llave, mientras el guardia me hablaba por radio que no habia nadie el huesped me hablaba por telefono, me describio el cuadro a un lado de la puerta, en eso se oye estatica y se cuelga el telefono.

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  4. Vivo en una casa de la costa grande de Guerrero, es de barro con techo de tejas, una casa vieja. Una tarde me encontraba con mi perro descansando en mi hamaca, me levanté y al entrar a la cocina me topé con un pequeño jaguar negro, con manchas menos oscuras, me miraba con sus grandes ojos amarillos y profundos. Me quedé atónito mirándolo, pensé que lo imaginaba, pero mi perro gruño. El pequeño jaguar miró a mi perro y poco a poco se desvaneció. Mi mascota olfateo donde había estado parado el animal, siguió olfateando un rato más. Realmente no sé qué pasó.

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  5. Pues yo
    Una vez pase por algo así bien raro.

    Iba caminando por el parque esta por donde vivo y entonces vi enfrente de mi, a unos 3 metros de mi, a un primo mio que vive a unas dos horas del lugar, hacia mucho que no lo veía y era siempre una gran fiesta que el y su familia, o mis tios, vivieran a nuestra ciudad, era el, su esposa, su hija, su hijo y un bebe, estaban saliendo de un carro, estaban charlando muy alegremente el estaba vestido de traje, algo un tanto rato pues solo lo había visto así una vez y por eso recordaba lo peculiar que se veía en traje y los niños estaban vestidos como si actuarán en una obra de teatro, túnicas de colores y sombreros.
    Era tan sorprendente la situación que solamente me quede allí, mirándolos, de una manera un tanto acosadora tal vez, solo esperando a que me voltearan a ver, a que caminaran rumbo a mi casa, a que hicieran algo mas, pero ellos estaban muy ensimismados, pensé en cuanto tiempo hacia que no los veíamos y que debía ir a mi casa ( a unos 10 metros de ahí) a contarle a mi madre, retrocedí, di vuelta en una esquina y me detuve, debía de saludarlos ya, esta situación era extraordinaria, entonces di media vuelta, gire en la misma esquina y …
    Ya no estaban alli, las calles son grandes y era una tarde silenciosa y no escuche a ningún carro arrancar, tampoco podía ver ningún carro alejarse, me quede allí en silencio, totalmente sorprendido y sin palabras, dure unos 5 minutos así, solo pensando en como les explicaria eso a mis madre, o si volverían en unos minutos.
    Han pasado dos años desde ese día y no e vuelto a ver a mi primo, aparentemente desde hace años a estado viajando y mudándose de casa, nunca cerca de nuestro estado.

    En verdad fue algo muy extraño que solo me hizo pensar en que tenía que ser un fallo en la realidad, algo así de loco en lo que yo jamas hubiera pensado, yo no sufro de alucinaciones ni de ningún trastorno y aun en algunas noches no puedo dormir por pensar en ese dia.

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