Los parques de diversiones siempre son bonitos y acogedores, ¿verdad? Pues no. Dismaland, el nuevo proyecto timoneado por Banksy, la figura más respetada y talentosa en lo que respecta al arte urbano en nuestros días, es todo lo que quieras menos lindo.
Verrückt Meg-A-Blaster es, en palabras llanas, el mayor tobogán de agua del mundo. Este “juguete”, que aún está en fase de pruebas, se encuentra en Kansas City en los Estados Unidos y promete derrotar al campeón actual que se localiza en Ceará, Brasil.
Los responsables del complejo estiman que el tobogán de agua gigantesco estará listo y disponible para el público hasta el segundo semestre del 2014, sin embargo, los responsables del proyecto seguirán liberando nueva información en este lapso. En primer lugar, la atracción recibió el nombre oficial de Verrückt Meg-A-Blaster y vale la pena advertir que verrückt significa LOCURA en alemán, una clara advertencia para aquellos que insisten en encarar a este tobogán como un “juguete”.
El parque encantado y la chica fantasma. Una leyenda japonesa que hace referencia a un misterioso parque de diversiones real. Takakonuma Greenland, situado en Hobara en Japón, una localidad próxima a Fukushima, (sitio devastado por un tsunami, mismo que causó accidente nuclear en 2011).
En 1973, los parques de atracciones se habían convertido en los lugares más populares en Japón, la tendencia era de: personas que se divertían y empresarios limpiando cada centavo de cada niño y adulto. Era algo muy lucrativo para la época, sin embargo, echar a andar un parque no era barato, ni lo es todavía.
Makoto era un empresario que tenía un “sueño”. El miserable infeliz deseaba construir un parque de diversiones, pero no tenía dinero.
La leyenda dice que Makoto buscó la ayuda de un poderoso Oni conocido como Amanojaku. Por si no lo sabes, un Oni es una especie de demonio en Japón y Amanojako es un poderoso y malvado demonio que tiene la capacidad de despertar y realizar los más oscuros deseos de una persona.