Ya en la Biblia, en el capítulo 27 del Exodo, versículo 20, se describe el tabernáculo con una lámpara eterna. Numerosos autores, griegos, árabes, romanos y medievales, relataron el descubrimiento de esas lámparas, la mayoría del tiempo en tumbas, pero también en templos antiguos.
He aquí unos ejemplos de descubrimientos de esas lámparas imposibles: