En Internet, Amou Haji se popularizó como “el hombre más sucio del mundo”. Aunque cruel, el mote era adecuado pues este iraní se mantuvo durante más de cinco décadas sin bañarse. Haji habitaba una zona rural en la provincia de Fars, al sur de Irán. En múltiples ocasiones los vecinos intentaron persuadirlo para que tomara un baño. Sin embargo, él siempre se negó pues creía que enfermería de gravedad si entraba en contacto con el agua y el jabón.
En Teherán, la capital de Irán, tener una mascota te puede llevar a prisión. La ciudad es el escenario principal de una nueva ola de incautaciones de animales domésticos. Ahora, las autoridades no solo van por las mascotas, sino también por los dueños que pueden terminar tras las rejas. Recientemente, la policía anunció que pasear perros en parques públicos era un delito.
Tras el asesinato del general Qasem Soleimani tras un ataque perpetrado por Estados Unidos en Bagdad, la tensión bélica entre Irán y Estados Unidos alcanzó su momento más preocupante. ¿Cuáles son las probabilidades de que el país árabe declare una guerra contra los estadounidenses? ¿Y si esto sucede, qué pasaría con Irán?
Los humanos han venido empleando el poder del viento desde la antigüedad. Sin las velas impulsadas por las corrientes de aire hubiera resultado imposible recorrer los grandes océanos para explorar tierras desconocidas. En los hogares, el viento impulsaba enormes molinos que trituraban granos para convertirlos en harina y también permitía la extracción de agua en ríos y arroyos. De hecho, quizá los primeros molinos aparecieron en Persia en torno al siglo 5 a.C.
Ehsan Mehrbakhsh es un artista iraní que se especializó en dibujo, ilustración y diseño gráfico. Pero cuando se trata de crear buena parte de su obra, prefiere dejar todo ese conocimiento en segundo plano y liberar todo el espacio posible a su creatividad subconsciente, cosa que resulta en obras poco ortodoxas y llenas de detalles lisérgicos.
Quienes ven las fotografías de mujeres iraníes en la actualidad ya saben qué esperar: el cuerpo casi tapado por completo, un hiyab (velo) para cubrir la cabeza también y pocas zonas de piel a la vista. La vestimenta femenina en este país está determinada por la ley y, por esta misma razón, son pocas las mujeres que se atreven a llevar vestimentas más osadas.
