El fotógrafo italiano Gabriele Galimberti, ya bien conocido por sus series “Los juguetes favoritos de los niños del mundo” y “Las recetas de la abuela“, se unió a su amigo también fotógrafo, Edoardo Delille, para crear un proyecto fotográfico bastante curioso, titulado “Mirrors and Windows“. En sus viajes por los cinco continentes, los dos amigos fotografiaron las habitaciones donde mujeres, de entre 18 y 30 años, duermen. Esto como una forma de abrir una ventana al mundo a estos lugares tan íntimos.
habitaciones
Las habitaciones de las chicas
Este es otro de esos experimentos sociales y fotográficos que nos encantan. Algo parecido publicamos en “Donde duermen los niños“. Solo que esta vez la idea vino de una fotógrafa libanesa llamada “Rania Matar” y en vez de niños fotografió a chicas jóvenes en su sitio más privado, sus habitaciones.
La idea de Rania era mostrar la vida de una mujer adolescente desde la perspectiva más intima y dejando de lado el mundo exterior que a veces resulta tan intimidante.
Donde duermen los niños
Sabes, o alguna ves te has puesto a pensar ¿donde duermen los niños?. Si no lo has hecho tienes la oportunidad de descubrirlo gracias a James Mollison, quien ha publicado un libro fotográfico con habitaciones infantiles de todo el mundo. Espera que este proyecto ayude a crear conciencia sobre la desigualdad que se vive en el mundo.
Dormitorios escolares en China
Siendo honestos el dormitorio de un estudiante rara vez está limpio (yo soy uno de esos maniáticos que siempre procura tener todo limpio y en orden, casi al nivel de Adrian Monk). Debido a la falta de tiempo, las largas noches de estudio, sin contar las borracheras, orgías y mitines, apenas y queda tiempo para barrer o sacudir el polvo. Pero estos chinos han vuelto a definir el concepto de “sucio“. ¿Cómo puede vivir alguien en tan pésimas condiciones?, aparte de un sistema inmune que envidiaría el mismo superman deben tener un casera que siempre esta de viaje.
Las habitaciones más sucias de acumuladores compulsivos
El máximo de tiempo que deje pasar sin limpiar mi habitación fue de un mes, después de ese tiempo me sorprendió la cantidad de cosas que pueden llegar a acumularse en un periodo tan corto de tiempo y la sensación de claustrofobia que puede llegar a producirte una habitación sucia.