Los asesinatos de My Way podrían deberse a extrañas coincidencias o a un fenómeno inexplicable en Filipinas. ¿Qué se te viene a la mente cuando escuchas el término fiesta? La mayoría lo asociamos con ir a un bar o discoteca. Y quizá hacer una reunión con un grupo de amigos en una residencia privada. Pero, para los filipinos fiesta es sinónimo de karaoke. En la cultura del archipiélago, las salas equipadas con micrófonos son el destino al final del día y un refugio en las madrugadas para aquellos que buscan seguir con la farra.