La Suprema Corte de Nueva Zelanda ha dictaminado que la redada policial en la mansión de Kim Dotcom fue ilegal, al igual que la incautación de los discos duros que fueron clonados después y llevados ilegalmente desde Nueva Zelanda a los EE.UU. por el FBI.
Las acusaciones bajo las que se allanó la mansión del dueño de Megaupload eran generales y no estipulaban de forma clara los delitos, dictamino la Juez Helen Winkelmann.