Además del envenenamiento en actividades rutinarias, la era victoriana es un lapso interesante en la historia. Dejó como legado las locomotoras a vapor, la fotografía y el primer sanitario de descarga. Sin embargo, este anhelo de innovación entre los victorianos a menudo resultaba catastrófico. Disponían de tantos productos químicos peligrosos, que era como dejar a un niño con una caja de fósforos junto a una montaña de fuegos artificiales.
Época Victoriana
Taza para el bigote de la época victoriana
Gracias a movimientos culturales como Movember, en los últimos años el bigote dejó de considerarse una característica inalienable de cualquier oficial del orden que se respete para, de forma gloriosa, crecer en el rostro de orgullosos hombres en todos los rincones del mundo. El bigote está de moda, y gracias a esto podemos encontrar toda clase de productos relacionados con estas vellosidades bajo la nariz masculina, por lo que es solamente cuestión de tiempo antes que la taza bigotera se convierta en un artículo de uso común… otra vez.
5 Mortales prácticas de belleza en la era victoriana
El cine suele mostrarnos una época victoriana donde todo en la mujer tiene que ver con la clase y la belleza, aunque para ser justos algunas tramas suelen representar aquellos tiempos de forma bastante sombría. Y es que para las bellas damas que vivieron la cruda realidad de la época victoriana, el día a día era todo un suplicio. Hoy te presentamos cinco de las más peligrosas y mortales prácticas de belleza en la era victoriana.
Madres invisibles de la época victoriana
Cuando las primeras imágenes aparecieron en la década de 1820, hubo un furor en todo el mundo, porque la realidad finalmente podría ser retratada con más fidelidad. Sin embargo, como la técnica de fotografía todavía estaba en fase de desarrollo, las primeras imágenes demoraban, a veces, horas para ser capturadas por el lente de la cámara.