A menos que hayas estado varado en una isla solitaria durante los últimos dos meses, debes saber que la cosa está que arde en Ucrania. Claro, si estás leyendo esto desde un bunker a prueba de bombas atómicas, entonces la cosa ardió mucho más de lo que esperábamos, pero no fue la primera vez.
Hace unos 160 años, en la región de Crimea, una disputa colocó de un lado al Imperio Ruso y del otro al Imperio Otomano, al Francés, al Ingles y al Reino de Cerdeña. Se trató de un conflicto causado principalmente por incompetencia, arrogancia, temor y azar, una larga batalla que se extendió durante tres años, de 1853 a 1856, resultando en más de medio millón de muertos. Fue un evento que afectó profundamente a la geopolítica de la región.