La humanidad ha puesto satélites en órbita desde hace décadas, y en la actualidad existen miles de ellos sobre nuestras cabezas. Muchos de estos son empleados para las telecomunicaciones, otros en la realización de mapeos y estudios científicos. Incluso algunos pueden ser visibles desde la superficie y, también cabe recordar, que diversos de estos dispositivos son empleados con fines militares en misiones secretas.