El mundo, o mejor dicho, los humanos tenemos un problema enorme con la basura. Se estima que los mexicanos producimos en promedio 1 kilogramo de basura al día, aunque resulta un tanto esperanzador sin nos comparamos con nuestros vecinos del norte quienes producen 4 kg de desechos a diario. Eso es más del doble de lo que se producía en la década del 60, y gracias a la explosión demográfica y al consumismo desmesurado estos números no hacen más que aumentar año con año.
Si por casualidad llegas a dar un vistazo a este video, sin saber de qué se trata y sin audio nunca te atreverías a apostar sobre lo que habla, pero el punto es que los problemas de seguridad alimentaria en China no pueden tener mejor representante que el repugnante problema del aceite ilegal de alcantarilla. ¿Sabes lo que es esto?
El aceite de cocina es muy utilizado en la comida china, por lo que algunos vendedores ambulantes, hombres y mujeres emprendedores, hurgan entre la porquería: contenedores de basura, desagües, alcantarillas e incluso aguas residuales con el fin de separar la basura solida o liquida que contiene partes de aceite. Luego, procesan este aceite de cocina y lo venden a precios por debajo del mercado para los pequeños restaurantes, generalmente ambulantes, que lo utilizan para preparar sus platos.
La obsolescencia programada es la razón por la que un teléfono celular termia en el bote de la basura con menos de ocho meses de uso, o una impresora nueva sólo durará un año. En 2005, más de 100 millones de teléfonos celulares fueron desechados solamente en los Estados Unidos. Un CPU de computadora, que en 1990 duraba cuando menos siete años, ahora tiene una duración media de solamente dos años. Los teléfonos celulares, computadoras, televisores, cámaras fotográficas caen en desuso y se descartan con una velocidad aterradora. ¡Bienvenido al mundo de la obsolescencia programada!
Rachelle Strauss es una británica con conciencia ecológica que quiso convencer a su familia de reducir al mínimo los residuos producidos en casa, casi hasta el punto cero. Y estuvo muy cerca de lograrlo – en 2009, Rachelle, Richard y su hija, Verona, de 9 años de edad, lograron producir solamente un cesto de basura en un año.
El hecho exigió mucho esfuerzo y razonamiento, pero de ninguna manera significó sacrificar su calidad de vida. La familia británica recicla casi todo, planta gran parte de lo que come, usar los restos como fertilizantes y lo que compran lo adquieren con productores locales, lo que reduce el número de envases. Cuando este no es el caso, los tres llevan sus propios recipientes reutilizables.
Con el aumento de la expectativa de vida debido a las mejoras de salud y los avances tecnológicos, cada día somos más, consumimos más y por consecuencia desechamos mucho más basura de lo que hacíamos hace apenas un siglo. La contaminación es un mal emergente que surge con el crecimiento desmedido de la población y pareciera que no hay nada que podamos hacer para detenerlo. Eso queda en evidencia en estos impresionantes 15 datos sobre la contaminación que quizá nos ayuden a comprender las consecuencias tan graves que está soportando este planeta, que de forma figurada, ya nos está quedando chico.
Una infografía con datos y estadísticas asombrosas sobre las botellas de agua. Mientras una gran parte del mundo clama por agua limpia, los Estados Unidos y otros países gastan millones en botellas de agua a pesar de que tiene fácil acceso a los suministros de agua potable. No solo gastamos agua y dinero de forma innecesaria, en ocasiones agua con estándares mucho más bajos comparada con aquella que sale del grifo, sino que arrojamos al medio ambiente millones de toneladas de botellas plásticas hechas a base de petroleo que toman más de 1000 años en degradarse completamente. Esta Infografía presenta un escalofriante vistazo a las botellas plásticas de agua.