Misteriosos puntos brillantes podrían ser rastros de otro universo

Los datos proporcionados por el telescopio Planck, propiedad de la Agencia Espacial Europea, podrían darnos un primer vistazo a otro Universo, un mundo con una física distinta que está colisionando con el nuestro. Al menos así lo concluyó un análisis de Ranga-Ram Chary, investigador del U.S. Planck Data Center, tras detectar un extraño brillo en la radiación del fondo de microondas mapeada por el telescopio, fenómeno que se produciría cuando la materia de un universo vecino se derrama sobre el nuestro.

Burbujas ejemplo multvierso

 

El multiverso.

Según las teorías cosmológicas modernas donde se sugiere que el Universo que observamos no es más que una burbuja entre un océano, este tipo de colisión debería ser posible. El multiverso podría ser consecuencia de la inflación cósmica, una idea ampliamente aceptada donde se postula que el universo primitivo se expandió de forma exponencial tras el Big Bang.

Una vez que empieza, la inflación nunca se detiene por lo que una multitud de universos se hace una consecuencia inevitable. Probablemente, cada Universo que surge cuenta con una física particular. Algunos pueden ser muy diferentes, mientras otros pueden estar repletos de partículas y reglas semejantes a las que rigen el nuestro, incluso podrían ser exactamente idénticos.

Dicha noción podría explicar por qué las constantes físicas en nuestro universo parecen tan perfectamente sintonizadas para posibilitar la existencia de planetas, estrellas, galaxias y vida.

 

¿Cómo saber si hay un universo vecino?

Incluso si existen, estos universos en forma de burbujas serían casi imposibles de detectar. Dado que el espacio entre ellos y el nuestro siempre se encuentra expandiéndose, la luz se vuelve demasiado lenta como para transmitir cualquier información entre regiones independientes.

Sin embargo, si dos burbujas se generaron lo suficientemente cerca como para colisionar antes de que el espacio se expandiera, podrían haber dejado una marca.

En el año 2007, Matthew Johnson de la Universidad York, en Canadá, y su equipo llegaron a proponer que esta colisión de burbujas podría manifestarse en forma de “señales circulares” en la radiación de fondo de microondas, una especie de anillo luminoso y caliente de fotones.

En 2011, tuvieron la oportunidad de investigar estas señales en los datos proporcionados por la sonda WMAP de la NASA, precursora del telescopio Planck, pero no tuvieron éxito encontrándolas.

Nebula burbuja

 

Una hipótesis muy interesante.

Ahora, Ranga-Ram Chary cree haber encontrado una firma distinta de una colisión con un universo paralelo. En lugar de enfocarse en la propia radiación, Chary la obtuvo de un modelo de todo el cielo. Posteriormente, fue “desvaneciendo” todo lo demás: estrellas, gas y polvo.

En teoría, no debería haber quedado nada más que ruido. Sin embargo, en una determinada franja de frecuencia surgieron regiones del cielo que parecen más brillantes a lo que deberían. Estas anomalías pudieron generarse en una colisión cósmica: nuestro Universo colisionando con otra parte del multiverso.

Estas “regiones brillantes” parecen haber surgido varios cientos de miles de años después del Big Bang, cuando electrones y protones unieron fuerzas para crear el hidrógeno.

Dado que esta luz generalmente es atenuada por el brillo del fondo de microondas cósmico, este momento en la historia del universo, conocido como “recombinación”, debería ser muy difícil de detectar incluso para el telescopio Planck. Pero el análisis de Chary encontró que las regiones eran hasta 4,500 veces más brillantes de lo que supone la teoría.

Una explicación interesante para este fenómeno es que se dejó un exceso de protones y electrones en la región de contacto con el otro universo. Esas manchas que encontró Chary requieren que el universo al otro lado de la colisión contenga aproximadamente 1,000 veces más partículas que el nuestro.

Otro mundo

 

Las dudas.

Obviamente existen multitud de reservas con esta propuesta. Todavía es muy pronto para llegar a un veredicto final sobre el significado de estas manchas.

En 2014, un equipo en el Polo Sur que hacía uso del telescopio BICEP2 comunicó el descubrimiento de una señal débil con implicaciones cosmológicas increíbles: espirales de luz polarizada aparentemente ofrecían evidencia observable de la inflación. Desafortunadamente, se encontró que esta señal provenía del polvo dentro de nuestra propia galaxia.

David Spergel, de la Universidad Princeton, en Estados Unidos, cree que el polvo nuevamente está nublando las conclusiones en esta ocasión. “Creo que vale la pena tomar en cuenta las posibles alternativas. Las propiedades del polvo cósmico son más complicadas de lo que imaginamos, y creo que se trata de una explicación más plausible”.

Joseph Silk, de la Universidad Johns Hopkins, también de Estados Unidos, muestra un panorama más pesimista. Aunque considera que el artículo de Chary es un buen análisis de las anomalías en los datos del Planck, argumenta que la reivindicación de un universo alterno en completamente imposible.

¿Lo comprobaremos algún día?

Chary sabe que su idea es experimental. “Afirmaciones inusuales, como la evidencia de universos paralelos, exigen cargas de pruebas muy altas”, admite.

Un obstáculo para esta verificación es que estamos limitados por los datos en sí mismos. Aunque el telescopio Planck sea hipersensible al fondo de microondas cósmico, no busca medir las distorsiones espectrales que Chary propone.

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5 comentarios en «Misteriosos puntos brillantes podrían ser rastros de otro universo»

  1. Un universo con más partículas significa un universo más joven o implica que es un universo 1000 veces mas denso. Entonces en ese universo los agujeros negros serían equivalentes a las estrellas del nuestro? Entonces por que no buscar radiacion hawking en los lugares donde se dan esas colisiones

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