“Neurosis de guerra”, el rostro del horror en combate

Si te gustan las historias relacionadas con la Primera Guerra Mundial, resulta bastante probable que alguna vez te hayas encontrado con la fotografía del soldado que ilustra esta publicación. No creo que sea necesario especificar que el hombre no simplemente sonríe a la cámara, ¿cierto? Ese rostro es la viva imagen de los horrores que sufren los combatientes en los campos de batalla.

Neurosis de guerra

Según algunas fuentes, la imagen fue capturada en la batalla de Flers-Courcelette en el marco la ofensiva del Somme, una de las batallas más largas y sangrientas de la Gran Guerra que sucedió en septiembre de 1916. No hay ningún registro sobre la identidad del soldado retratado, pero es indudable pasa por algo que en ese entonces llamaban “neurosis de guerra” o “fatiga de combate”, y la perturbación de su estado mental no sólo se transmite a través de su expresión facial, sino también por la mirada.

Foto fatiga de combate
Un panorama más amplio de la misma imagen.

¿Pero, cómo se puede estar tan seguro de que se trata de una persona afectada por los traumas de la guerra y no de un hombre que simplemente decidió sonreír para la foto? Bueno, un indicio importante es que en aquella época las personas no tenían la costumbre de sonreír cuando iban a ser fotografiadas. El estándar era quedarse quietos y lo más serios posible, por lo que este dato hace que el retrato de este militar sea mucho más inquietante.

 

Con el espíritu derruido.

Los soldados solían referirse a estos episodios de neurosis de guerra con los términos “shell shock” – un profundo estado de shock que provocaba la lluvia de casquillos, proyectiles y cápsulas que terminaban destrozando el espíritu del más fuerte. Los militares que pelearon en las trincheras de la Primera Guerra Mundial atestiguaron de primera mano los efectos de esta condición, que después sería conocida formalmente como trastorno de estrés postraumático y que actualmente sigue afectando a muchos militares que experimentan los horrores en el campo de batalla, así como individuos que pasan por experiencias sumamente traumatizantes.

Batalla del somme (1)
Soldados atrincherados durante la Batalla del Somme.

Los síntomas más comunes entre aquellos que sufren estrés postraumático abarcan la confusión mental, dificultad de concentración, fatiga, pesadillas recurrentes, taquicardia, parálisis, trastorno de conversión que genera problemas para ver y escuchar, temblores, etc. Pero, volviendo al tema de la Primera Guerra Mundial, lo más triste es que muchos de estos soldados que llegaron a desarrollar estrés postraumático fueron procesados e incluso ejecutados por considerarlos débiles, cobardes o desertores.

No existe una cifra oficial sobre el número de soldados que murieron a causa de la perturbación mental durante la guerra, sin embargo, años después de finalizado el conflicto el gobierno de Gran Bretaña solicitó perdón a todos esos hombres que fueron acusados y ejecutados por cobardía y deserción.

Batalla del somme (3)
Las montañas de casquillos se levantaban por todos lados durante aquel cruento episodio.

Entre el 15 y 22 de septiembre de 1916 tuvo lugar la batalla de Flers-Courcelette, librada por un pelotón alemán contra soldados británicos y franceses. Fue precisamente durante este episodio que los tanques de guerra incursionaron en la historia de la guerra, cuando el escuadrón alemán Jagdstaffel 2 dio inicio a sus misiones, un escuadrón al que llegaría a pertenecer el legendario Barón Rojo.

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5 comentarios en «“Neurosis de guerra”, el rostro del horror en combate»

  1. Hola Hery! Gracias por la nota, la verdad siempre había visto esta foto en internet y otros lugares, porque me interesa el tema de las guerras, pero jamás imaginé la historia detrás de ella. Siempre me sorprenden tus artículos. Sigue así! Un saludo desde Argentina.

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  2. Bien se dice que para un soldado lo mas dificil no es su etapa en el campo de batalla, lo mas dificil es tratar de llevar una vida normal una vez terminado su servicio

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  3. Qué se puede agregar a esta información si ya todo está dicho. Quizás una utopía; que jamás ocurran más guerras en este mundo. Utopía porque hay ahora más de una guerra, en este mundo del 2018.

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    • El ser humano y la propia naturaleza es violenta, nunca en la historia de la humanidad se ha experimentado un lapso de paz mundial y por desgracia nunca lo habrá.

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