La Era de la Información está cambiando, como nunca antes, la dinámica social. De hecho, con el surgimiento de las RR.SS. hace poco más de una década empezaron a surgir nuevas profesiones. Hoy, es completamente normal que cualquier individuo se gane la vida en Internet. Y entre esas nuevas ocupaciones en línea, quizá la más polémica sea la de influencer.
También conocidos como influenciadores digitales, la principal actividad de estos individuos es la creación de contenido para un nicho muy específico (a veces demasiado específico). Los seguidores de un influencer suelen mantenerse al tanto de su opinión y a menudo la toman como referencia para su vida cotidiana. Muchas veces, los puntos de vista de estos personajes influyen directamente en la toma de decisiones de su público cautivo.
Y los tipos de influencer son tan variados como las flores que crecen en el campo. Personajes como Natasha Crown comparten día a día su vida cotidiana con millones de seguidores. Por ejemplo, a últimas fechas esta mujer ha compartido lo difícil que le resulta encontrar novio. Y no por que sea una persona exigente. Según Natasha, los hombres huyen cuando ven el tamaño de sus posaderas.
Natasha Crown.
Con 27 años de edad, Natasha Crown ha pasado por cinco intervenciones quirúrgicas para alcanzar el tamaño de trasero que posee en la actualidad. Así lo reveló la influencer en una entrevista para en canal de YouTube Truly. En total, la mujer ha invertido más de US$ 150 mil en cirugías plásticas. Sin embargo, está lejos de su meta pues se ha empeñado en coronarse como la mujer con el trasero más grande del planeta. Tan es así que ya programó su sexta cirugía en los próximos meses.
En una cita a ciegas organizada por los productores del canal Truly, Natasha no logró encontrar a su media naranja. Sin embargo, asegura que este tropezón no la desviará de sus objetivos. Y está segura de que en un futuro próximo encontrará a alguien con quien compartir sus sueños. “Mi última relación terminó hace más de siete años. Soy algo exagerada, por eso creo que las personas me temen. Genero miedo en los hombres. Por si fuera poco, está mi personalidad, cuerpo y todo lo demás. Es demasiado”, confiesa la influencer.
El inusual objetivo.
Respecto a que la cita a ciegas no haya funcionado, la mujer comentó: “lo entiendo. Es demasiado para él. Son demasiadas curvas que no puede manejar. No funcionó y simplemente seguiré con mi vida, espero encontrar a alguien en el futuro”. Pero, la verdad es que la vida amorosa de Natasha Crown está en segundo plano. Actualmente, toda su atención está puesta en la sexta cirugía plástica.
Vivimos tiempos privilegiados para la autoestima. Hoy, cualquier individuo con dinero suficiente puede cambiar aspectos físicos de su cuerpo que le resultan desagradables. Es cierto que muchas cirugías se destinan a mantener la función anatómica de ciertas partes del cuerpo y, en la medida de lo posible, conservar un aspecto natural.
Pero, en el otro extremo tenemos intervenciones que buscan negar la apariencia natural del humano y crear formas antinaturales. Tal es el caso de Natasha Crown que, en su anhelo de poseer el trasero más grande de la Tierra, ha cambiado por completo su forma física. “Voy a tener el trasero más grande del mundo. Es mi objetivo y lo alcanzaré. Me hice la primera cirugía a los 20 años y pronto sumaré la sexta”, sentenció.
Hay gordas que tienen el c*lo mas grande que esta persona y no lo andan presumiendo. La protagonista de esta nota es mas plástico que nada.
Por otro lado, toda esta gente que se la vive operando, no piensa en las consecuencias de tantos implantes? No solo las secuelas sino también por la desproporción del cuerpo. Qué haría si se queda atrapada en un ascensor donde la puerta solo abre para dejar pasar una persona de cuerpo promedio?
Mucho jamon pa dos huevitos
¿Miedo? En realidad es repulsión, pero ella no está lista para esa plática.
“Los seguidores de un influencer suelen mantenerse al tanto de su opinión y a menudo la toman como referencia para su vida cotidiana.”
Son gente sin personalidad propia (y son mayoría), necesitan un referente para vivir, nadie ha hecho nada por evitarlo porque eso es lo que los medios quieren: gente influenciable … y consumidora.