El caso de Natalia Grace se suma a una exclusiva lista de adultos haciéndose pasar por niños para que los adopten. Una pareja estadounidense se llevó la sorpresa de su vida tras adoptar a una mujer que se hacía pasar por una menor. La protagonista de esta historia es Natalia Grace, que al momento de la adopción se hizo pasar por una niña de 6 años de edad cuando realmente tenía 19. Tres años después, la pareja conformada por Kristine y Michael Barnett descubrió que su pequeña hija adoptiva era en realidad una mujer adulta.
Al poco tiempo, la pareja salió de Estados Unidos y se instaló en Canadá, dejando a su suerte a Grace. A causa de esto, las autoridades estadounidenses los acusaron de abandono y negligencia. Suponiendo que dejaron sola durante tres años a la supuesta hija adoptiva. Kristine y Michael se defendieron argumentando que la supuesta niña era en realidad una mujer mayor de edad.
Natalia Grace, que actualmente tiene 28 años, llegó a la familia Barnett en 2010. Y, según sus padres adoptivos, padece enanismo y presenta rasgos sociópatas. De hecho, la pareja la acusó de intentar quitarles la vida.
La macabra historia de Natalia Grace.
La perturbadora historia salió a flote después que las autoridades del estado de Indiana acusaran a los Barnett de abandono. Dicen que Natalia Grace, una ciudadana ucraniana, estuvo sola e indefensa durante tres años. Agregando que la “niña” padece una rara forma de enanismo que limita su estatura a los 91 centímetros, además de dificultar sus movimientos.
Contrario a lo que afirma la policía, Kristine y Michael Barnett argumentan que son las víctimas en esta historia. Y describen toda una variedad de amenazas y episodios de terror en los tres años que cuidaron a la supuesta niña. Durante una entrevista para el Daily Mail, Kristine asegura que Grace no dejaba de decirle todo lo que haría con ellos. También solía dibujar a toda la familia en escenarios macabros, incluyendo a los cuerpos sepultados o en bolsas de basura.
Cabe recalcar que, antes de las acusaciones, tanto Kristine como Michael Barnett destacaban como padres ejemplares. Especialmente en el cuidado y la dedicación hacia su hijo Jake, al que diagnosticaron con autismo a los dos años de edad y terminó convertido en un genio. La madre adoptiva asegura que en múltiples ocasiones encontró a Natalia Grace agregando productos químicos a la comida. En cierta ocasión, le preguntó por qué había agregado cloro a su café. Y la respuesta de la “niña” fue que pretendía envenenarla.
Adulta disfrazada de menor.
Kristine Barnett se percató de que algo andaba mal la primera vez que vio a Natalia Grace sin ropa. Particularmente por el abundante vello púbico que poblaba su zona íntima. Por si fuera poco, la hija adoptiva manifestó un vocabulario avanzado que llamó la atención de los padres. Además, asegura tener pruebas de que la supuesta niña en realidad es una mujer.
Por ejemplo, Natalia Grace tenía la dentadura de un adulto y menstruaba regularmente. De hecho, en el tiempo que la cuidaron los Barnett no creció un solo centímetro. Situación sumamente inusual, incluso suponiendo que se trataba de una menor con enanismo. La pareja regresó a la ciudad de Lafayette y se puso a disposición de las autoridades en septiembre del año pasado. Pero, tras pagar una fianza de US$5 mil ambos quedaron en libertad.
Los Barnett están convencidos de que pueden demostrar la veracidad de su historia, aunque el paradero de Natalia Grace todavía se desconoce.
Caso Natalia Grace, una historia de película.
Aunque se trata de una historia espeluznante, el caso Natalia Grace es uno más en la lista de adultos que se hacen pasar por niños para que los adopten. Una historia parecida inspiró la película La huérfana (2009). En este caso, la familia adoptó a una mujer adulta y resultó mucho más siniestra de lo que aparentaba. Ya te hablamos de esta historia en 7 películas con historias inesperadas.
En el largometraje, la mujer se hace pasar por una niña de 9 años. Aunque realmente se trata de una adulta que sufre una rara condición médica que la hace parecer una menor de edad. Toda esta situación propicia una atmósfera de terror y suspenso. La fraudulenta adopción retratada en la película y el caso de Natalia Grace propician cuestionamientos sobre el sistema de adopción y cómo se eligen a las familias adoptivas.
¿Cómo rayos es posible que una familia termine adoptando a una mujer adulta que se hace pasar por una niña? ¿Existe alguna forma de garantizar la seguridad y el bienestar tanto de los niños adoptados como de las familias adoptivas? Aunque la historia de Natalia Grace es impactante, no debemos olvidar el objetivo de algo tan noble como la adopción. Proporcionar a un pequeño desamparado un ambiente amoroso y estable, es algo digno de reconocimiento.
Sin embargo, es fundamental que el sistema de adopción pase por una revisión y, sobre todo, se establezcan garantías para que no se repitan esta clase de historias.