El fraile Niccolò da Poggibonsi partió del puerto de Venecia en 1346 en un viaje a Tierra Santa que incluía destinos como Jerusalén, Damasco, el Cairo y Alejandría. Durante la peregrinación, el franciscano elaboró diversos registros de su viaje en tablillas de yeso. Cuatro años después Poggibonsi regresó a Italia y todos sus esbozos se transfirieron a tinta y papel, quedando almacenados en la Biblioteca Nazionale Centrale, en Florencia.
Casi siete siglos después, la investigadora Sandra Toffolo redescubrió uno de estos grabados, de la Universidad St. Andrews, en Escocia. Al estudiar el dibujo donde aparecen edificios, canales y las características góndolas de la ciudad italiana, Toffolo descubrió que se trataba de la ilustración más antigua de Venecia descubierta hasta la fecha.
Venecia en la época de Niccolò da Poggibonsi .
“El hallazgo de esta vista de la ciudad tiene grandes implicaciones para el conocimiento que poseemos sobre las representaciones de Venecia, toda vez que confirma que desde hace mucho tiempo ya fascinaba a los ccontemporáneo”, señaló la especialista en un comunicado. Toffolo pasó meses comparando este grabado con otras representaciones más recientes de Venecia.
Los investigadores que se han sumergido en el trabajo de Niccolò da Poggibonsi señalan que el fraile fue extremadamente cuidadoso con su diario de viaje: para que sus ilustraciones reflejaran la realidad, en la medida de lo posible, solía medir puntos de referencia y anotar las magnitudes, como el número de pasos o brazadas de largo, entre los objetos retratados. Además de esta ilustración de Venecia, el trabajo del fraile incluye ilustraciones de elefantes y arquitectura en el Cairo, así como el Domo de la Roca y el famoso Templo de Salomón, en Jerusalén.
En la inscripción en yeso que hizo sobre Venecia, Toffolo identificó diversas marcas de alfileres. Según la especialista, esto sugiere que la imagen se transfirió a otras superficies: se tamizaba polvo a través de los agujeros de alfileres, transfiriendo los contornos de la ilustración. “La presencia de estos orificios es un fuerte indicio de que esta vista de la ciudad se copió”, señala.