El sótano del terror donde dos hermanas fueron violadas durante 41 años

Esta es la repugnante mazmorra donde un hombre de Austria violó sus propias hijas en una pesadilla que comprendió más de 15.000 días y noches.

Si te defiendes, entonces tendré que matarte“, decía Gottfried W. a sus hijas, Christine, de 53 años, y Erika, de 45 años, que se vieron obligadas a dormir en la noche en un estante de madera, mientras que su padre, ahora de 80 años, dormitaba en una cómoda cama.

En medio de utensilios de labranza, viejos recipientes de aceite, madera, sacos de cemento y suciedad violaba a sus propias hijas con una depravación que solo esta a la altura de Josef Fritzl.

Su esposa Berta, de 85, que falleció en 2008 también fue víctima del sadismo de este hombre, la pinchaba con una horquilla.

Las mujeres se convirtieron en enfermas mentales en los últimos años, no fue una condición con la que nacieron sino un consecuencia de los tormentos que sufrieron durante años.

  • Las mujeres habrían nacido sanas, pero la nueva evidencia revela enfermedades mentales a causa del abuso.
  • Las victimas eran ocultadas en un sótano rodeado de escombros de madera y herramientas.
  • Los vecinos sabían que el padre era “severo y estricto” en su hogar.
  • Las mujeres eran vista una sola vez cuando iban a visitar la tumba de su madre.

La policía dice que su madre era muy sumisa, les hizo prometer en su lecho de muerte no decir nada a nadie sobre lo que su padre les hacia.

Otras habitaciones de la casa ubicada cerca de Braunau am Inn – lugar de nacimiento de Hitler – eran espaciosas y muy cómodas.

Pero las mujeres se vieron obligadas a vivir en la miseria, dormir en la cocina y a usar una silla con orinal en lugar del baño de la casa.

Escena de horror: La casa en St. Peter am Hart, Brannau, Austria, donde las dos mujeres fueron violadas repetidamente por su padre, quien ahora tiene 80

Cuarenta años de abuso concluyeron en mayo de este año, cuando Gottfried trató de salirse con la suya con Christine una vez más y esta finalmente explotó.

Ella le golpeó con una jarra de leche en la cabeza. Cayó al suelo y se abrió la cabeza. Durante dos días no fue capaz de moverse y la policía dijo que moriría.

Finalmente las mujeres, que fueron visitadas de vez en cuando por un trabajador social – pero condicionadas a ocultar los hechos de horror que estaban sufriendo – fueron llamadas a declarar.

Las mujeres llamaron a una ambulancia para su padre y se mantuvieron al cuidado de este. Pero sin decir una sola palabra. No fue sino hasta junio cuando se lo contaron a una trabajador de la Cruz Roja y fue este hombre quien dio aviso a la policía.

Austria sigue sin concluir las investigaciones sobre el secuestro de la escolar Natascha Kampusch en los años 90 y menos sin llegar a la conclusión del caso de Fritzl.

Gottfried, conocido como Friedl por sus vecinos era un padre arquetipo de Austria muy a la vieja escuela. Severo y un rígido mentor de su hogar y sobre todo protector de los secretos que ahí guardaban.

Él controlaba todo el contacto social de sus hijas con el mundo exterior. La única vez que fueron vistos juntos fue cuando visitaron la tumba de su madre.

Gottfried ha sido trasladado a una cárcel en las cercanías de Ried, mientras que la investigación en su contra continúa, sus hijas se someten a una terapia psiquiátrica. Se enfrenta a cargos de violación, privación ilegal de la liberta, crueldad, asalto y amenazas de muerte.

Fuente: dailymail

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