El balonazo que derribó un avión durante un partido de fútbol

El 19 de febrero de 1959, el despeje de un portero derribó un monomotor durante un juego de fútbol. Es la clase de historia que uno está tentado a contar durante un convivio con los amigos. Sin embargo, por temor a que te llamen mentiroso no lo haces. Pero, esta tragicomedia realmente sucedió en las inmediaciones de Asunción, la capital de Paraguay. Aquel domingo, el General Genes jugaba de local contra el club Oriental.

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El piloto Alfredo Lird, un gran aficionado del General Genes, volaba a muy baja altura sobre el campo del club de sus amores. Las maniobras de Alfredo terminaron molestado tanto al arquero Roberto Gabriel «Tico-tico» Trigo, que decidió poner fin al tema. Tomó uno de los balones y le dio un puntapié en dirección a la aeronave. Poco importó la protesta, pues Lird siguió volando bajo sobre el campo de juego.

Eventualmente, el esférico golpeó la nariz de la aeronave, dañó la hélice y provocó que el avión perdiera altura a gran velocidad. Irremediablemente, el aparato se estrelló decenas de metros más adelante. Para suerte de Lird, unos matorrales amortiguaron la caída y solo resultó con un gran susto y varios raspones.

El tiro de Tico-tico.

La anécdota divulgada por la gente de la época señala que Tico-tico, quien vivía cerca del campo de fútbol, se asustó tanto que salió corriendo para ocultarse en su casa. Lo encontraron bajo la cama de su abuela Josefa. El avión derribado por el portero era un Paulistinha CAP-4 fabricado en Brasil, equipado con un motor de 90 hp y hélice de madera.

Tal fue la hazaña de Tico-tico, que su historia apareció en un episodio de Aunque Ud. no lo crea, conducido por el célebre Jack Palance.

Increíblemente, cuando se comprobó que no había heridos de gravedad, el partido de fútbol continuó. Todos los jugadores regresaron al campo para seguir jugando, con excepción de Tico-tico. La historia dice que Lird camino hasta su casa para tranquilizarlo. Allí, doña Josefa lo recibió con una escoba lista para repartir golpes si alguien intentaba llevarse a su nieto.

Lird le explicó que iba en son de paz y logró que el portero regresara al juego. El General Genes se hizo con la victoria anotando 2 goles a 0.

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