Dedo de Morton, el antiguo símbolo de belleza que podrías tener

¿El segundo dedo de tu pie es más grande que el primero? Entonces, tienes algo en común con el Hombre de Vitruvio, la Estatua de la Libertad, la Venus de Milo y otras famosas representaciones anatómicas del cuerpo humano en la historia del arte. Se le conoce como “dedo de Morton” y para muchas culturas y artistas del pasado, tener el segundo dedo del pie más grande que el primero era una marca de inteligencia, liderazgo y belleza.

dedo de morton

Dudley Joy Morton y su historia con los pies.

Esta peculiaridad anatómica se llama así en honor al Dr. Dudley Joy Morton, cuya carrera estuvo dedicada al estudio de esta curiosidad. De hecho, este cirujano ortopédico llegó a formular la hipótesis de que la mayoría de problemas en los pies provenía de los propios dedos y no de fallas en los arcos. Para Morton, cualquier defecto en los metatarsianos era culpable de callosidades, uñas encarnadas y cualquier otro padecimiento de los pies.

Morton llegó a escribir un libro titulado “Oh Doctor, My Feet!”, una obra de términos llanos dirigida a un público que solía hacer extensas jornadas laborales con zapatos sucios y tacones altos tras la Gran Depresión en los Estados Unidos. Era común que el cirujano hiciera referencia al segundo dedo del pie en sus libros y, finalmente, ese dedo largo terminó recibiendo su nombre.

El dedo griego.

Sin embargo, hasta la década de 1930 este mismo dedo fue conocido ampliamente como “dedo griego”. Y es que prevalece en la cultura y el arte oriundo de la Antigua Grecia, sobre todo en las esculturas. ¿Pero, por qué? ¿A quién se le ocurrió destacarlo como un símbolo de belleza y por qué terminó convertido en algo tan recurrente?

Los antiguos griegos tenían un romance muy especial con la “proporción aurea”, algo que la naturaleza nos muestra de múltiples formas y, se cree, guarda el secreto de la perfecta armonía estética. De hecho, la “divina proporción” surgió gracias a Euclides, quien inventara la geometría alrededor del 300 a.C. Desde el punto de vista de los antiguos griegos, el dedo de Morton tenía ese matiz matemático con que tanto se maravillaban.

pie romano vs pie griego

Además de ser una forma fácil de representar una peculiaridad anatómica de los humanos, hacían referencia a esta relación geométrica, que era vista como un guiño al mundo de las matemáticas y valorada por los entusiastas del arte por el equilibrio intencional que proponía. Para los griegos, que el segundo dedo del pie fuera más largo representaba una característica anatómica de belleza, y la inclusión en sus obras de arte fue totalmente intencional.

La proporción en el arte egipcio.

Esto los separó de los egipcios, que se enfocaron más en la escala y precisión que en la estética. Los artistas egipcios construyeron sus obras en base a “el canon de la proporción”. Cuando se observa una obra en la que todo está deliberadamente alineado, de forma que se puede trazar una línea perfecta desde el centro, se trata del canon de la proporción.

Las representaciones humanas que elaboraron los artistas egipcios se distinguen por ser muy rectas, con pies, piernas, brazos, torso y cabeza perfectamente alineados. Cuando se observan los dedos de los pies en obras egipcias, es fácil distinguir un arco descendente constante desde el dedo gordo hasta la parte exterior del pie.

Cuando los griegos llegaron, tiraron a la basura el anticuado enfoque y propusieron uno más innovador. Basaron sus obras de arte en la belleza y el romance, en aquello que la mente humana encuentra más interesante en detrimento de la perfección y precisión. El dedo griego nació en las artes visuales.

dedo de morton primavera Sandro Botticelli
En el cuadro Primavera, de Sandro Botticelli, se aprecia el famoso dedo griego.

Los griegos pusieron de moda el dedo de Morton. Y cuando empezó a popularizarse el estudio y la comprensión de la proporción aurea, los romanos, italianos, franceses y celtas lo adoptaron como característica de su arte. Por eso, la famosa Estatua de la Libertad posee el famoso dedo de Morton.

Esta es la historia de cómo el dedo de Morton terminó asociado con la belleza estética, pero, ¿qué sucede con los rasgos de personalidad vinculados a esta peculiaridad anatómica?

Las antiguas lecturas de pie o podomancia.

Bueno, mucho antes de que los griegos adoptaran esta estructura del pie en particular, en regiones como la India y China se hacían “lecturas de pies” desde el año 3000 a.C. En español, el término para la extraña práctica es “podomancia”. Como la quiromancia, la podomancia busca estudiar las líneas de los pies, estructura de los huesos, longitud de los dedos, etc. Aunque actualmente la práctica ha pasado de moda, para muchas culturas del pasado fue algo muy importante. Y según aquellas antiguas creencias, las personas que nacían con el dedo de Morton tenían muy pocas cosas negativas.

dedos estatua de la libertad
La Estatua de la Libertad tiene el dedo de Morton.

Para los indios, quienes poseían el dedo de Morton solían valorar la paz y felicidad por encima de las riquezas y el éxito. Creían que estos individuos poseían habilidades de liderazgo, mientras aquellos con “dedos comunes” eran catalogados como “empleados leales”. De forma similar, los chinos consideraban que, si tenías el segundo dedo del pie más largo, estabas destinado a ser un líder y modelo a seguir para las multitudes.

A los que tenían el primer dedo del pie más largo los veían como personas sumisas con tendencia a pasar desapercibidos. En la actualidad, los expertos en reflexología argumentan que las personas con dedo de Morton son más enérgicas, activas, creativas y prospectos ideales para puestos de liderazgo.

Si eres parte del 25% de la población que tiene dedo de Morton, ya podrías sentirse especial. Reclama tu posición de liderazgo, presume tu belleza y apodérate de tu rareza. Haz a un lado el dolor de espalda, la incomodidad de esos zapatos o el hecho de que algunos crean que conservas un rasgo directo de los Neandertales. Para los indios, chinos, griegos y otras culturas del pasado tu peculiaridad fue única.

7 comentarios en «Dedo de Morton, el antiguo símbolo de belleza que podrías tener»

Deja un comentario