En Lugares del Mundo encontrarás todos aquellos destinos que deberías visitar antes de morir. Paisajes espectaculares, obras majestuosas, naturaleza increíble y arquitectura impresionante abundan en estos artículos.
En el medio de Berna, la elegante capital de Suiza, es posible encontrar la Kindlifresserbrunnen, una gigantesca estatua de una bestia grotesca devorando a un niño, una obra de arte cuyo significado se perdió con el paso del tiempo.
Ubicado en el Parque Nacional Volcan Tenorio de Costa Rica, en Centroamérica, no es casualidad que al río Celeste le hayan puesto ese nombre: el vívido color azul de sus aguas lo convierte en uno de los cuerpos de agua más bellos de todo el continente. Cuando se observan las fotografías de este lugar, ya es posible darse cuenta de porque despierta tanta fascinación.
A medida que la actividad económica se centraliza en las grandes ciudades de Europa, sus pequeños pueblos se van quedando solos. Los ancianos en retiro son las únicas personas que viven en estos sitios, pues la población económicamente activa suele migrar a las grandes ciudades. Esto representa un gran problema para los gobiernos de estos municipios, pues dejan de recibir el flujo de dinero de los jóvenes y absorben el gasto fijo de las personas en retiro.
La playa es el lugar perfecto para pasar las vacaciones, un fin de semana o simplemente cuando se quiere despejar un poco la mente y tomar algo de sol. La naturaleza ha sido muy gentil y tenemos la fortuna de toda una variedad de playas hermosas alrededor del mundo.
Podemos encontrar maravillas arquitectónicas en prácticamente todos los rincones del mundo, antiguas y modernas por igual. Sin embargo, siempre resulta apabullante la forma en que la creatividad en la mente de los arquitectos conspira para crear edificios que asemejan más a obras de arte.
En el pasado estos sitios sirvieron a un propósito, pero hoy se encuentran completamente desocupados.
Durante el siglo XIX, los nipones descubrieron que esta isla poseía extensas minas de carbón y comenzaron a poblar el lugar para explotar los yacimientos del mineral. Edificios enteros fueron construidos para servir como hogar a estas personas. Durante la década de 1950, en Hashima habitaron más de 5,000 personas. Sin embargo, en 1974 la exploración paró y los habitantes abandonaron el sitio.