Esto es lo que pasa cuando enfrentas, primero, a un gringo con complejos de autoridad que a la mínima se exalta, y segundo, a un español con muchas ganas de trollear a alguien. Vamos que el guantazo es impresionante.
Esto es lo que pasa cuando enfrentas, primero, a un gringo con complejos de autoridad que a la mínima se exalta, y segundo, a un español con muchas ganas de trollear a alguien. Vamos que el guantazo es impresionante.