El sarampión, por sí solo, ya es una enfermedad peligrosa. Esto es suficiente para aplicar la vacuna contra la enfermedad y no tener que pasar por penurias. Sin embargo, un nuevo estudio concluye que esta enfermedad es mucho más malévola. Además de la infección, el sarampión es capaz de provocar que nuestro cuerpo “olvide” el método más efectivo para combatir a otros enemigos ya superados, lo que a largo plazo comprometería el sistema inmunológico. En otras palabras, el sarampión es capaz de hacernos un factory reset inmunológico.
Vacunación
El esclavo que salvó a un país de la viruela
En el siglo XVIII se diseminó una enfermedad particularmente devastadora que mataba una de cada tres personas infectadas: la viruela. Las desafortunadas víctimas morían a los pocos días o semanas tras la contaminación, y el virus era completamente distinto a la forma en que las personas entendían las epidemias.
¿Las vacunas son malas, se deben evitar?
Cuando llega el invierno también arrancan las campañas de vacunación contra la influenza estacional y, con ellas, llega la paranoia de algunos: ¿La vacuna es mala? ¿No me va a enfermar? ¿Y el Mercurio? Como las autoridades sanitarias lo reafirman todo el tiempo, el riesgo de efectos secundarios siempre está presente, como en cualquier tipo de medicamento. En el caso específico de la vacuna contra la influenza estacional, los más comunes parecen ser fiebre, secreción nasal y cefalea.