Excavaciones arqueológicas inéditas sobre el campo de exterminio nazi de Treblinka están revelando fosas comunes, así como la primera evidencia tangible de que en este lugar hubo cámaras de gas, donde cientos de miles de personas fueron asesinadas. La investigación revela que los nazis no eran tan buenos cubriendo sus crímenes como pensaban. Aunque destruyeron el campo en 1943, las paredes de ladrillo y los restos de las cámaras de gas permanecieron, de la misma forma que una enorme cantidad de huesos humanos.