En la Edad Media, un tercio de la población europea pereció a causa de la Peste Negra. Ahora, una investigación rastreó el inicio de esta terrible pandemia hasta Asia Central, más específicamente en el actual Kirguistán. A mediados del siglo XIV, el mundo atestiguó una de las enfermedades más mortíferas de la historia. La Peste Negra afectó Asia Occidental, pero se ensañó mucho más con los europeos.
Desde los primeros brotes de la peste bubónica, hasta los problemas de contagio después de la gran migración europea, los médicos de la antigüedad se enfrentaron a un gran problema: ¿cómo tratar a los pacientes que podrían contagiar a otras personas? La respuesta fue tan simple como macabra – aislarlos en islas de cuarentena.
La muerte negra se cobró la vida de 25 millones de personas durante el siglo XIV, la pandemia de peste más devastadora vista por la humanidad hasta nuestros días, y al margen de una tragedia tan apocalíptica se escribieron incontables historias que retrataron la negrura y desesperanza en aquellos días.
La Gran peste de Londres fue otro de esos eventos devastadores, la enfermedad en este lapso terminó con más de una quinta parte de la población de la ciudad y es justamente aquí donde se desarrolla el cortometraje “The Periwig Maker” (El Fabricante de Pelucas).
Poveglia es una de las múltiples islas situadas en la laguna de Venecia, en Italia. Pero en lugar de ser un sitio de belleza y abundancia, la isla es una herida supurante en el inmenso océano. Además de considerarse uno de los lugares más embrujados del planeta, también se le considera como uno de los sitios más malvados de la historia. Los motes de La isla del no retorno, la Isla de los Muertos y la Isla de la Locura dan una idea de lo terrorífico del sitio. Hoy, a excepción de los agricultores de vid, casi nadie visita Poveglia. Incluso los pescadores locales se alejan del sitio por temor a atrapar huesos humanos entre sus redes.
