Los errores pueden ocurrir en cualquier trabajo u oficio, pero tratándose de salones de belleza, cualquier equivocación resulta particularmente grave debido a su impacto directo en la autoestima y apariencia de los clientes. Cuando confiamos en profesionales para tratar nuestro cabello, uñas o rostro, es importantísimo buscar aquellos con recomendaciones y opiniones positivas.
Melissa Raouf es una estudiante universitaria que llegó a las semifinales del Miss Inglaterra. A sus 20 años de edad, es la primera reina de belleza en la historia del certamen que concursa sin ningún tipo de maquillaje en el rostro. Originaria del sur de Londres, la propia Melissa decidió que no llevaría ningún tipo de maquillaje durante todo el concurso.
En el pasado, el maquillaje era socorrido para ocultar las imperfecciones y destacar los rasgos naturales del rostro. Se trataba únicamente de embellecer, nunca de exagerar. Para el influencer filipino Pili Drian Bautista, el maquillaje es una herramienta que le permite transformarse en los personajes y seres más fantásticos concebidos en su imaginación. Aquí sí se trata de exagerar para lograr una apariencia inquietante, aunque definitivamente atractiva. Es difícil apartar la vista de estas transformaciones llenas de detalles.
Además del nacimiento de los hijos, pocas fechas resultan más importantes en la vida de una mujer que el día de su boda. Suele ser un evento tan importante que planean hasta el más mínimo detalle. De hecho, las que tienen posibilidades pagan a expertos en el tema para que ese sueño de una boda mágica se convierta en realidad.
En la historia de Inglaterra, pocos monarcas resultaron tan influyentes e importantes como Isabel I. Hoy la recordamos por llevar suntuosos vestidos, adornarse con toda clase de colores, portar una peluca pelirroja y decretar que todos los súbditos del palacio vistieran exclusivamente ropa en color blanco o negro. La reina mostraba una enorme preocupación por la imagen que transmitía a sus gobernados.
En Internet se encuentran ilusiones ópticas increíbles que producen un conflicto entre lo que nuestros ojos ven y lo que el cerebro entiende. Sin embargo, las representaciones de la artista coreana Dain Yoon son dignas de admiración. Esta mujer fabrica ilusiones ópticas increíblemente realistas y detalladas empleando su rostro como lienzo. Hasta los observadores más expertos pueden dudar de lo que están viendo.
