Todo en torno a Krokodil parece fantasioso, exagerado o inventado. Pareciera un guion de una película de ficción que ilustra un futuro decadente y marginal donde una droga “corroe” a la sociedad. Pero tal cosa es real y está siendo comercializada, distribuida y consumida en diversas partes del mundo.
Krokodil es una droga barata y altamente adictiva que desde hace una década se volvió un verdadero flagelo en Rusia y que lentamente se extiende sobre Europa del Este y en algunos países del continente americano.