¿Existió en verdad El Pípila?
La realidad es que no existen pruebas sobre la existencia de Juan Martínez: los barreteros eran muchos en una región que vivía de la minería y es posible que los jefes insurgentes enviaran a uno de ellos (Juan, Pedro, Antonio…) como carne de cañón. El Pípila representa a esos hombres anónimos sacrificados en la Independencia.