La cuestión del por qué soñamos es motivo de un intenso debate para la ciencia. La comunidad se divide al explicar por qué nuestro cerebro fabrica tantas fantasías mientras dormimos. Una de las últimas teorías que podría llevarnos a comprender la experiencia del sueño está relacionada con el aprendizaje de máquinas (del inglés, machine learning).
¿Has pasado por esos días en los que hubiera sido mejor no salir de la cama? ¿Has enfrentado esos momentos en los que lo único que quieres es desaparecer? ¿Has llegado a esas situaciones en las que te encuentras a ti mismo aparentemente sin salida, sin aliento y con el corazón saliéndote por la boca? Nada de eso es gratis e improductivo, sino todo lo contrario.
Algún día te encontrarás conduciendo por una larguísima carretera de dos carriles. Alrededor no habrá señales, automóviles, animales, ni siquiera aves surcando el cielo. Solo tú y una carretera que se extiende hasta donde alcanza la vista entre un inhóspito desierto. Puedes manejar eternamente sobre esta carretera sin llegar a ningún lado. Puedes darte vuelta y conducir por donde viniste. Nada sucederá. Te mantendrás conduciendo por siempre sin jamás encontrar un fin.
Seguramente has escuchado un montón de historias de personas que fueron consideradas muertas clínicamente durante algunos minutos, pero que terminaron volviendo a la vida después de un lapso. En la mayoría de los casos, estos pacientes relatan que pasaron por una especie de apagón. Recientemente, un relato más intenso sobre este tipo de experiencia fue publicado en Reddit y terminó llamando la atención de todo el mundo.
En San Diego, en los Estados Unidos se encuentra el hotel más aterrador del mundo. Los huéspedes que asisten a este lugar lo hacen con el único fin de pasar una verdadera experiencia de horror que dura entre 4 y 8 horas, según la voluntad de la personas. A los responsables del sitio les gusta anunciar que “vivirás tu propia película de terror”.
Después de cierto tiempo aprendes la diferencia, la sutil diferencia, entre dar la mano y encadenar el alma. Aprendes que amar no significa depender, y que la compañía no siempre significa seguridad.
Comienzas a aprender que los besos no son contratos ni los regalos promesas. Y comenzamos a aprender que las personas que nos temen no nos respetan… y viceversa. Y comienzas a aprender que realmente puedes soportar, que eres realmente fuerte y que puedes ir mucho más lejos después de pensar que no podías más. Y que la vida tiene valor y que tú tienes un valor diario para la vida. Y comenzamos a aceptar las derrotas con la cabeza erguida y la mirada al frente, con la gracia de un adulto y no con la tristeza de un niño.