Gracias a la ciencia sabemos que el agua hirviendo se transforma en una nube de cristales de hielo cuando entra en contacto con temperaturas bajo cero.
El fotógrafo canadiense Michael Davies tuvo la acertada idea de poner en práctica esta teoría y logró captar el fenómeno en una serie de hermosas fotografías. Pero en lugar de agua, él utilizó té hirviendo.
Davies vive en Ontario y junto a un grupo de amigos hizo un viaje hasta el círculo polar ártico para apreciar las puestas de sol.
“Preparamos algunos tés y después solo fue cuestión de lanzarlos al aire”, dijo el fotógrafo. “Nada fue por casualidad. Monitoreé la temperatura, esperé a que el viento estuviera calmo y preparé los planos fotográficos. Incluso el Sol en el medio de la dispersión fue intencional, pese a que era algo imposible de controlar.”
El resultado es espectacular:
Puedes ver más fotografías de Davis en su cuenta de Flickr.
¡Grandioso el cambio a la página! ¡Felicidades!
Ok
si
Son cambios de temperatura, así se forman las nubes allá arriba, son espectaculares las fotografías.