Vlad Tepes: el verdadero Drácula

Desde finales del siglo XIX, con la aparición de la novela Drácula, de Bram Stoker el mito del vampiro se arraigo en la imaginación popular. La figura y el nombre de un antiguo y cruel jefe guerrero de los Balcanes vuelven a rondar las mentes: el príncipe Vlad Dracul.

dracula

La muerte y la sangre juegan un papel primordial en la imaginación de los hombres, luego no hay que sorprenderse del éxito que encuentra el tema del vampiro, muerto-vivo que vive eternamente chupando la sangre de sus víctimas. Por medio de la horrible criatura, se aborda también el sueño, aunque alterado, de una existencia infinita.

Una historia ficticia.

Drácula relata el dramático enfrentamientos entre un grupo de personas, lideradas por el profesor Van Helsing, médico versado en las ciencias ocultas, y el despiadado vampiro de Transilvania, el conde Drácula.

“Su nariz aguileña le daba verdaderamente un perfil de águila; tenia la frente alta, abombada, los cabellos escasos en las sienes pero abundantes en el resto de la cabeza; las cejas enmarañadas casi se juntaban sobre la nariz, y eran tan largas y tupidas que daban la impresión de rizarse. La boca, o al menos lo que yo veía bajo el enorme bigote, tenía un expresión cruel, y los dientes, resplandecientes de blancura, eran especialmente puntiagudos; sobresalían de los labios de un rojo intenso que revelaba una vitalidad extraordinaria para un hombre de esa edad. Sin embargo, las orejas eran pálidas y terminadas en punta; el mentón ancho, también revelaba fuerza, y las mejillas, aunque huevas, eran firmes. Una palidez sorprendente era la expresión que daba esa cara.

La tradición vampírica ya se encuentra sólidamente establecida cuando se publica la novela en 1897: en la época romántica, Byron, Giovanni, Polidorí evocaron a estos muertos que abandonan sus tumbas para atormentar a los vivos. Sin embargo, el origen de los vampiro se remonta aún más lejos: a las harpías de la Antigüedad conocidas por raptar hombres que jamás volvían a aparecer, a los monstruos sedientos de sangre de las leyendas medievales rusas, alemanas o rumanas.

Lo novedoso de la novela de Stoker reside en su aspecto sexual, tanto en sus apetitos sádicos como mórbidos. También se encuentra un cierto número de procedimientos que el autos, apasionado por la magia, imagina para espantar a los vampiros: la utilización del ajo o de la cruz y el hecho de que los vampiros puedan entrar en una casa sin haber sido invitados, invenciones varias veces retomadas de ahí en adelante en la literatura y cine.

Drácula, tal como lo describe Bram Stoker, es ante todo un personaje de ficción. No obstante, el escritor se inspiró, para crearlo, en un hombre que existió realmente, el siniestro Vlad IV, apodado Tepes, “el Empalador“.

Inspirada en la realidad.

En el siglo XV, uno de los príncipes de Valaquia, provincia bajo dominación turca, ubicada entre los Alpes de Transilvania y el Danubio, es conocido con el nombre de Vlad Dracul, este último término significa dragón, el emblema del rey. Cuando su hijo Vlad IV, nacido en 1430, lo sucede a la edad de veinticinco años, recibe el título de Drácula, es decir, hijo del dragón.

Desde su infancia, Vlad Tepes es confrontado con la violencia. Ve a su padre asesinado y su  hermano mayor enterrado vivo. El mismo es retenido varios años en una fortaleza como rehén por los turcos. En efecto, el Imperio Otomano se encuentra entonces en el apogeo de su poderío y se extiende hasta las fronteras de Hungría.

Vlad Tepes.

Vlad Tepes, a pesar de su sombría personalidad, es aún considerado por muchos rumanos como héroe nacional por haber intentado liberar las provincias rumanas de Valaquia, Moldavia y Transilvania del dominio invasor turco. El es uno de los jefes guerreros más temido por las tropas de ocupación del sultán Mehmed el Conquistador. Sin embargo, en 1462, es vencido y debe refugiarse en Hungría, donde es nuevamente tomado prisionero por razones políticas hasta 1473.

Vlad el Empalador

El empalamiento (un método de tortura y ejecución donde la víctima es atravesada por una estaca. La penetración puede realizarse por un costado, por el recto, la vagina o por la boca. La estaca se solía clavar en el suelo dejando a la víctima colgada para que muriera), en una estaca de madera o hierro, es su método favorito para deshacerse de los prisioneros turcos o de sus opositores – de ahí su sobrenombre.

En el siglo XV, su crueldad es conocida y un grabado alemán de 1499 lo muestra festejando en medio de los cadáveres empalados. Se estima entre 50.000 y 100.000 el número de sus víctimas empaladas, quemadas o desolladas vivas durante su corto reinado de una decena de años. Como sutil refinamiento, el príncipe a menudo mandaba engrasar o arromar la punta de las estacas para prolongar la agonía del ejecutado.

Su sadismo no conoce límites: crónicas locales cuentan que para castigar a unos emisarios turcos que no se descubrieron en su presencia, ordena que se les clave el fez en el cráneo. En otra ocasión, manda reunir a una gran cantidad de pobres y minusválidos en una amplia sala cerrada bajo el pretexto de invitarlos a un banquete y ordena prederle fuero.

De vuelta en 1476 en el trono de Valaquia, Vlad Drácula es asesinado dos meses después  sin que se sepa exactamente quién organizo su caída: rivales locales o turcos. Es decapitado y su cabeza ensartada en la punta de una estaca. A principios de nuestro siglo, su presunta tumba es abierta y, para sorpresa general, se encuentra vacía. Así, la leyenda se reúne con el personaje mítico creado por Bram Stoker.

7 comentarios en «Vlad Tepes: el verdadero Drácula»

  1. el verdadero nombre es vlad tepes, y no fue la primera pelicula de vampiros, la primera fue nosferatu en 1922 aunque si estaba basada en la novela de bram stoker

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  2. siempre me llamo la atencion dracula, los vampiros, tengo los colmillos grandes y me gustan jaaja
    buen en fin, al final dracula era terrible torturador que loco, voy a ver si me leo la novela
    saludos gracias por toda la data!

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