El día que los rusos se acabaron el vodka

La Segunda Guerra Mundial marcó un antes y un después en la historia del mundo. Las sombrías consecuencias del conflicto serán un recuerdo permanente para la humanidad. Las estimaciones sobre las víctimas fatales de los años en que se mantuvo activa la guerra sugieren entre 50 y 70 millones de vidas perdidas.

No cabe duda alguna que la noticia del fin de esta guerra fue un evento excepcional para todo el mundo, un acontecimiento tan importante que merecía una gran celebración. De esto pueden dar testimonio los rusos, que aún formaban parte de la Unión Soviética. La gran fiesta en las calles se extendió durante más de 22 horas, al punto que todas las reservas de vodka en Moscú se agotaron. ¿Puedes imaginar a los rusos sin vodka?

Intenta desde este punto de vista: México se hace con la victoria en una guerra de la que dependía su existencia y para celebrarlo organizan una fiesta gigantesca, al punto de que todas las reservas de cerveza del país se terminan. En otras palabras, ¿puedes imaginarte el tamaño de esa celebración? Así sucedió en Rusia o, mejor dicho, en la antigua URSS.

Según el relato de un reportero de la época que se encontraba en Moscú, “tuve la suerte de poder comprar un litro de vodka en la estación de tren, cuando llegué a la ciudad, pues después sería imposible. El 10 de mayo no había ni una sola gota de vodka en todo Moscú. Nos lo bebimos todo”.

La noticia de la paz en Europa fue motivo de resaca para una nación entera. En la madrugada del 9 de mayo de 1945, los radios anunciaban que las tropas nazis se rendían ante la Unión Soviética. La fiesta arrancó en ese mismo instante, de forma que los ciudadanos incluso salieron a las calles en pijama para celebrar. Fueron casi 24 horas hasta que Joseph Stalin regresó al país. Cuando llegó, encontró una nación prácticamente “seca”, sin una gota de la clásica bebida rusa.

 

Quizá te interesa:

6 comentarios en «El día que los rusos se acabaron el vodka»

Deja un comentario